Juego

Jardín en Valencia, septiembre de 2018


La vida, parece, es un juego:
A veces lanza una bola con efecto,
inalcanzable,
a veces la lanza
directa a tus manos.
El juego cambia,
en lugar de bola
ahora soy un disco volador:
me lanza, surco el aire,
me atrapa, me lanza de nuevo,
me pierde, caigo,
desaparezco en el suelo.
Parece llegar el momento
de la discreción, de agazaparse
donde nadie pueda ver
lo que se amaga
bajo los colores brillantes
de la superficie.
A veces soy más la pieza de caza,
aun así, sin perder la sonrisa,
siempre estoy dispuesto a jugar.

Comentarios

  1. No pierdas nunca la sonrisa ni las ganas de jugar, de vivir y afrontar nuevos retos, de equivocarte y volver a alzar el vuelo.

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