Tejado

Puçol (València), octubre 2022

 

Para cubrirlo todo, un tejado

sobre cimientos, ladrillos, pilares:

un refugio, mi guarida,

¿mi escondite?

Más bien el sitio al que regresar.


Un lugar, al fin, para refugiarme,

para sentirme protegido y sentir;

un sitio para compartir y prosperar:

simplemente, mi lugar para ser.


Un tejado cubriendo mi cabeza,

un tejado que acoge mi corazón;

un tejado que me protege,

un tejado que me deja creer

protegido, seguro, feliz.


Comentarios

  1. Un tejado, no de material duro, sino etéreo, tejido tupido de corazones dispuesto a dar todo aquello que necesitas para crecer y seguir adelante protegido, seguro, feliz. Gracias por tu poema reflexivo. Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Verdes en contienda

Año nuevo

Poesía

Luchadores

Aprendiendo

Tiempos (Disquisición gramatical)

No me hables

El estanque

Calma

Ximo